El mundo se vio sacudido el 21 de abril de 2025 con la lamentable noticia del fallecimiento del papa Francisco, quien tenía 88 años y había lidiado con un deterioro notable. El sumo pontífice murió en su residencia, ubicada en la Casa Santa Marta del Vaticano.
De acuerdo con el reporte médico oficial, Jorge Mario Bergoglio padeció un ictus que lo dejó en coma, seguido de una falla cardiaca irreversible. La información fue entregada oficialmente por el cardenal Kevin Joseph Farrell, quien anunció la partida del líder religioso.
Sin embargo, el fallecimiento del argentino también trajo de nuevo al debate público una de las antiguas profecías de Nostradamus, quien acertó con diferentes sucesos que han marcado al mundo. El reconocido vidente del siglo XVI escribió una cuarteta que dice: “Tras la muerte de un papa muy anciano, un romano de edad justa será elegido, pero su trono será cuestionado. Un joven de tez oscura, con apoyo de un gran rey, entregará el poder a otro de rojo””.
Esta predicción ha sido interpretada por algunos como una posible alusión al momento actual, aludiendo tanto a Francisco como al próximo sucesor en el trono de San Pedro. Pese a que se desconoce qué vendrá para la Iglesia católica, existe incertidumbre sobre el posible fin del mundo que anunciaba el vidente.
Por otro lado, otra interpretación de los escritos de Nostradamus ha generado aún más especulaciones. Se trata de una visión que menciona la llegada de tres papas: uno extranjero, seguido por uno anciano y finalmente uno conocido como “el papa negro”, cuya aparición estaría vinculada, según algunos, con el fin de los tiempos.
Este fragmento ha impulsado teorías sobre un eventual pontífice de origen africano, como el cardenal Peter Turkson, y el impacto simbólico y profético que esto podría tener.
“Primero, vendrá un papa extranjero, luego un papa viejo, y finalmente, un papa negro. Con él, el fin del mundo”, reseñaron distintos medios internacionales sobre las predicciones.
Se especula que esta llegada de un nuevo sumo pontífice marcará el inicio del fin del mundo, teniendo en cuenta los conflictos y cambios en el ámbito religioso.
El portal Ámbito puntualiza que aquella teoría se daba en el texto atribuido a San Malaquías, quien afirmaba que cada papa estaba reflejado en una frase en latín. El espacio señala el último dentro de la lista como petrus romanus, que significa “el que presidirá el juicio final”.
Medios como Marca recopilan especulaciones sobre lo que también significaría esta profecía, haciendo referencia al fin de la Iglesia católica y los giros dentro del Vaticano.
Mientras la Iglesia se prepara para el cónclave que determinará quién será el nuevo líder espiritual de millones de católicos en el mundo, estas profecías han despertado inquietudes, reflexiones y controversias.
Desde que asumió el liderazgo de la Iglesia católica en 2013, tras la histórica renuncia de Benedicto XVI, Francisco se convirtió en una figura transformadora. Como el primer papa originario de América Latina, enfocó su labor en las causas sociales, acercándose a los más necesitados y apostando por cambios profundos dentro de la institución eclesiástica.
