El 2025 pasará a la historia como el año que pudimos ver a la princesa Leonor por primera vez en bikini en las playas de Panamá.
Cada verano, el objetivo de los paparazzi es uno: conseguir la imagen de la reina Letizia en bikini.
Tras dos semanas en Palma de Mallorca, Felipe y Letizia ponían rumbo a Grecia. Y Grecia fue el origen de esa primera imagen que lo cambió todo.
Todo parece ir dentro de la normalidad. La pareja se divierte, pasa ratos amables lejos del foco mediático y se olvidan de los problemas que les esperan en Zarzuela.
Tan relajados están que pierden la medida y la precaución. La Reina se enfunda un bikini en tonos azules.
Gafas de sol y melena suelta. Letizia es feliz junto a su marido. En España nunca puede estar así.
Echa de menos sus años en los que no era la persona más conocida del país.
Una turista pasa cerca de ellos. Les reconoce. No era difícil.
Les hace unas fotografías. La Reina sale en bañador. Nadie se da cuenta de lo que está pasando.
Hasta que, poco después, aparecen en la portada de una revista. Extremadamente delgada, titulan varios medios.
Letizia entra en shock. Es la imagen que nunca hubiese querido ver.
La que nunca habían protagonizado ni la reina Sofía ni el rey Juan Carlos -al menos, en prensa española- y la que nunca más volverá a protagonizar ella misma.
Las fotografías de la reina Letizia en bikini.
Las fotografías de Letizia en bañador se convirtieron en la noticia del momento.
Algo había fallado en las enormes precauciones de Casa Real.
¿O es que alguien había querido dejar pasar lo evidente y que la imagen de la futura reina no fuese tan perfecta? No eran años en los que Letizia se encontrase cómoda con la familia de su marido.
Todavía princesa de Asturias, llevaba una década luchando por buscar su sitio y evitar los desplantes que habitualmente recibía. Nunca se supo más allá.
La versión oficial reza que una turista tomó las imágenes y estas acabaron en portada de la revista ‘Semana’.
La Reina llevaba gafas de sol y en algunos momentos se protegía con un gorro marinero.
Le acompañaban sus hijas Leonor y Sofía, todavía pequeñas. La futura Reina tomó buena nota de lo ocurrido y se juró que nunca más volvería a pasar.
Y así ha sido. Catorce años después, ni una fotografía de los reyes durante sus vacaciones privadas. Y eso que van todos los años.
La Reina ha puesto fin al mar, a las regatas y a todo lo que tiene que ver con mostrarse con menos ropa de la habitual.
No quiere tampoco esquiar ni nada que tenga que ver con las aficiones de los Borbones.
Nunca le ha gustado y tampoco lo ha inculcado en sus hijas. El Rey, eso sí, sigue protagonizando alguna escapada con amigos.
Las exigencias de la reina Letizia y su privacidad.
Cuando Letizia llegó a palacio dejó claro que era un trabajo y que como todos los trabajos, tenía un horario.
Fueron tantas las críticas que recibió que, poco a poco, ha ido puliendo y matizando.
Ahora la consorte se muestra dispuesta a organizar su agenda sin demasiado problema.
También la mayoría de edad de sus hijas Leonor y Sofía ha simplificado las cosas.
Las jóvenes ni siquiera residen ya en Zarzuela y hacen su vida de forma muy independiente.
La Reina controla su imagen al milímetro. Aunque desde Casa Real se ha apostado por la naturalidad, es una naturalidad bien controlada.
Letizia es muy consciente de la trascendencia de sus fotografías y vídeos y pone freno a todo sin que se note demasiado.
Lo que sí tiene claro es que fuera de sus compromisos, no hay imágenes de ella ni de su familia.
Ni de vacaciones, ni en salidas con amigas. Como mucho, les hemos podido ver yendo al cine.
Las salidas de la princesa Leonor durante estos dos años de formación militar también han estado blindadas.
Como cualquier joven de su edad, la princesa tiene amigos y amigas y sale a cenar, tomar algo o a bailar.
No hay nada de malo ni extraño en ello. Pero no queda nada ni fotografiado ni grabado.
El equipo que rodea a la princesa ya se encarga de que esto sea así.
A excepción de las imágenes de la princesa de Asturias en ropa de baño en las playas de Panamá que dieron la vuelta al mundo.
¿Volveremos a ver a la reina Letizia en bañador?.
No parece que esto vaya a ocurrir. Los reyes han vuelto a elegir las islas griegas como destino de vacaciones.
Los rumores les sitúan en la villa de lujo que los reyes Guillermo y Máxima de Holanda tienen en el país heleno.
Un lugar protegido, con acceso a una playa privada y con mucha seguridad. El sitio perfecto para descansar sin que nadie les pueda captar.
Si en estos últimos veinte años tan solo hemos visto a la Reina una vez tomando el sol, no parece que vaya a volver a repetirse.
Si algo han aprendido es a detener todo lo que incomoda en cuanto a imagen personal se refiere.
Y de inmortalizarla así serían, sin duda, las fotografías del año. Los reyes de vacaciones. Así disfrutan del sol, el mar y el verano.