La final de Supervivientes All Stars 2025 fue, sin duda, uno de los momentos televisivos más electrizantes del año.
La competencia entre Torres y Jessica mantuvo a la audiencia al borde del asiento hasta el último instante, pero no todo se trató solo de juegos y supervivencia.
El plató se convirtió en un campo de batalla cuando Jorge Javier Vázquez protagonizó una fuerte discusión con Marta Peñate, dejando claro que la tensión había alcanzado niveles insospechados.
Desde el inicio, la final prometía emociones fuertes.

Tony Espina fue el primero en ser expulsado, un desenlace que muchos ya veían venir debido a su controvertida actuación durante el concurso.
Su novia, Marta Peñate, no pudo ocultar su frustración, defendiendo a capa y espada a Tony y negando las acusaciones de trampa que pesaban sobre él.
Pero Jorge Javier Vázquez no estaba dispuesto a dejar pasar esas actitudes.
En un momento cargado de tensión, el presentador le reprochó a Marta su comportamiento, calificándolo de berrinche infantil y advirtiendo sobre un peligroso sentido de impunidad que, según él, algunos concursantes creen tener dentro de Telecinco.
La polémica se intensificó cuando se recordó el episodio en el que Tony Espina habría hecho trampa durante una prueba, algo que fue evidente para la mayoría de espectadores y miembros del equipo, pero que Marta negó vehementemente.

Mientras tanto, el duelo entre Torres y Jessica fue la verdadera batalla por el título.
Aunque Jessica contaba con un gran número de seguidores, su desempeño fue cuestionado por muchos, quienes la vieron como alguien que llegó lejos más por apoyo externo que por méritos propios.
Torres, por su parte, fue reconocido como uno de los mejores concursantes en términos de habilidad y resistencia, y su victoria fue celebrada como justa por una gran parte de la audiencia y expertos.
La expulsión de Miri, otro de los finalistas destacados, generó una ola de sorpresa y descontento en redes sociales.
Muchos opinaban que la final ideal hubiera sido entre Miri y Torres, por el nivel demostrado, pero finalmente la balanza se inclinó hacia Jessica.

El reencuentro con familiares también fue uno de los momentos más emotivos de la noche.
La presencia del padre de Miri y la madre de Tony aportaron un toque humano y cercano a la final, recordándonos que detrás del espectáculo hay historias personales profundas y complejas.
Por otro lado, la ausencia de Adara, quien había sido una figura polémica durante la edición, fue notoria.
Su bajo rendimiento y la falta de apoyo del público la dejaron fuera de los momentos clave del programa, evidenciando que no todos los concursantes logran conectar con la audiencia.
Además, el premio de 50,000 euros que Torres se llevó a casa tiene su “truco”: la mitad será retenida por Hacienda, algo que muchos desconocían y que pone en perspectiva la verdadera recompensa económica del reality.

En cuanto a la programación, la final marcó el fin de Fiesta, el programa que había estado en el aire durante años y que ahora será reemplazado por nuevos formatos con la esperanza de recuperar la atención del público.
Jorge Javier Vázquez, tras despedir la edición, se prepara para el próximo gran reto: conducir el Gran Hermano de Anónimos, un proyecto que promete ser un desafío aún mayor.
La edición de Supervivientes All Stars fue, en general, bien recibida, especialmente en comparación con la edición regular del año, que pasó prácticamente desapercibida.
Con un 20% de audiencia en la final, el programa demostró que el formato sigue teniendo fuerza y capacidad para generar interés masivo, a pesar de las polémicas y críticas.
La pregunta que quedó en el aire fue si la victoria de Torres fue realmente justa o si hubo factores externos que influyeron en el resultado.

Las redes sociales se llenaron de debates, opiniones encontradas y memes, reflejando la polarización que siempre acompaña a este tipo de programas.
En definitiva, la final de Supervivientes All Stars 2025 fue una mezcla explosiva de competencia, drama, polémica y emociones que mantuvo a España pegada a la pantalla.
El próximo debate final, conducido por Sandra Barneda, promete seguir alimentando la controversia y aclarar algunos de los episodios más oscuros de esta edición.
Mientras tanto, el público espera con ansias la siguiente temporada y se pregunta qué nuevos personajes y conflictos traerá el universo de Telecinco.
¿Podrá Gran Hermano Anónimos replicar el éxito y la intensidad de Supervivientes All Stars o el listón ha quedado demasiado alto?
Solo el tiempo y la audiencia lo dirán, pero lo que es seguro es que la batalla por el trono de la televisión española está más viva que nunca.