La actriz mexicana Silvia Pinal, conocida como la «Diva del Cine de Oro», dejó un último deseo que tocó a muchos: quería que Luis Miguel le cantara acompañado de mariachis en su funeral. Esta petición se destacó tras su fallecimiento y se convirtió en tema de especulación.
A pesar de que Luis Miguel no estuvo presente en el homenaje realizado en el Palacio de Bellas Artes, su presencia se sintió de una manera muy especial. En el lugar, entre las numerosas flores enviadas por amigos y colegas, destacó una gran corona de rosas blancas.
La corona enviada por el cantante llevaba una cinta negra con su nombre en letras doradas, un gesto que no pasó desapercibido. La delicadeza de las flores y su disposición, sin espacio entre ellas, mostraban la dedicación de Luis Miguel.
Este sencillo pero significativo obsequio llamó la atención de quienes asistieron al homenaje, destacándose entre las demás muestras de cariño. Aunque el cantante no cumplió con su promesa de cantar, la corona se convirtió en un homenaje simbólico.
Muchos consideran que este detalle de Luis Miguel fue una manera de honrar el deseo de Silvia Pinal de una forma única. La relación entre ambos siempre estuvo marcada por el respeto mutuo y la admiración.
A través de este gesto, Luis Miguel rindió tributo a la actriz, dejando claro su reconocimiento al legado de Pinal. En este pequeño pero significativo acto, se recordó el impacto que la actriz tuvo en la historia del cine y la cultura mexicana.