La edición 2025 de Supervivientes All Stars 2, presentada por Jorge Javier Vázquez, está dejando a la audiencia sin aliento con cada emisión.

La última gala no fue la excepción, marcando un antes y un después en la dinámica del concurso.

Gloria Camila sorprendió a todos al consolidarse como líder tras una prueba exigente que demostró su fortaleza física y mental.

Aquellos que dudaban de su capacidad quedaron en evidencia, ya que la joven supo imponerse con autoridad y sin perder la compostura.

Mientras tanto, la tormenta que azotó la isla añadió un toque dramático a la noche.

Los supervivientes tuvieron que soportar condiciones adversas que pusieron a prueba su resistencia y unidad, aunque algunos prefirieron aprovechar la situación para sembrar polémicas.

Uno de los primeros focos de discusión fue la defensa que Marta Peñate hizo de su novio, Tony Espina.

Acusado de ser un “teatrero” y de buscar polémicas innecesarias, Tony no ha caído bien ni dentro ni fuera de la isla.

Su actitud chulesca y la falta de respeto hacia compañeros como Carlos Alba han generado rechazo, mientras Marta parece perder brillo y ser considerada una “marca blanca” en las redes sociales.

Por otro lado, Torres, el bombero, se ha ganado el respeto de muchos.

Con una historia personal conmovedora y una actitud ejemplar, es considerado uno de los rivales más fuertes y con más posibilidades de llevarse el título.

La convivencia también ha dejado momentos divertidos, como cuando Sonia Monroy, la concursante mayor del grupo, recibió ayuda de Torres para superar una prueba física.

La imagen de él empujándola suavemente con el casco provocó risas y ternura entre los espectadores, mostrando que, pese a las tensiones, también hay camaradería.

Sin embargo, las polémicas no tardaron en aparecer.

La relación entre Gloria Camila e Iván González ha sido objeto de debate.

Aunque Iván es visto como un superviviente sólido, las discusiones entre ambos y la posible intervención de la dirección del programa para crear tramas han generado desconfianza en el público.

Otro foco de controversia es la supuesta “novela” entre Miri Pérez Cabrero y Alejandro Álvalá.

Muchos consideran que la historia está montada y que ambos buscan protagonismo a costa de la credibilidad del concurso.

Esta estrategia les está pasando factura y podría costarles caro en próximas nominaciones.

El gran protagonista negativo de la noche fue Quique Calleja, quien fue el primer expulsado.

Su paso por la isla estuvo marcado por intentos de sembrar polémicas y una actitud que no cayó bien ni entre compañeros ni en la audiencia.

Su acercamiento a Gloria Camila, a pesar de ser amigo de Rocío Carrasco, fue visto como oportunista y poco sincero.

Además, Quique ha demostrado ser muy sensible a las críticas, llegando a bloquear a periodistas antes de empezar el concurso.

Su imagen de “reportero tiburón” parece haber quedado atrás, y ahora muchos lo ven como un participante gris y poco carismático.

Un momento especialmente polémico fue el “beso de Judas” que dio a Sonia Monroy, una jugada que no tuvo ningún efecto y que fue interpretada como falsa y poco estratégica, considerando que tenía problemas con otros concursantes más conflictivos.

En cuanto a las nominaciones, la situación está muy reñida.

Se espera que Adara sea la primera salvada, mientras que la lucha por permanecer en la isla se centrará entre Elena, Tony Espina e Iván.

Elena, que en ediciones anteriores había tenido buen desempeño, está pasando desapercibida esta vez, y Tony sigue generando opiniones divididas por su actitud.

El presentador Jorge Javier Vázquez, además de guiar la gala, no pudo evitar hacer comentarios sobre su propio aspecto físico, generando un momento de humor inesperado que alivió la tensión del programa.

Por último, la audiencia está atenta a cómo evolucionarán las alianzas y las estrategias en los próximos días.

La edición All Stars 2 está demostrando que no solo se trata de sobrevivir en la naturaleza, sino también de navegar en un mar de traiciones, amistades falsas y juegos psicológicos.

En definitiva, Supervivientes All Stars 2 se perfila como la temporada más intensa y llena de drama hasta ahora, con Gloria Camila liderando la carga y Quique Calleja saliendo por la puerta trasera.

Los espectadores esperan con ansias la próxima gala, donde seguro habrá más expulsiones, nuevas polémicas y, por supuesto, más momentos que harán vibrar a toda España.

¿Quién será el próximo en caer?

¿Qué secretos saldrán a la luz?

Y, sobre todo, ¿quién logrará sobrevivir a esta jungla mediática sin perder la cabeza?

Solo el tiempo y la audiencia lo decidirán.

Mientras tanto, la isla sigue ardiendo y el espectáculo continúa.