Macaulay Culkin fue uno de los mayores actores infantiles de los 90, y no había película para niños que no contara con ese niño de pelo rubio y mirada traviesa. Con solo cinco años empezó en el mundo del cine, y su primer gran éxito llegó con Solos con nuestro tío (1989). Fue precisamente con esa película con la que llamó la atención del cantante Michael Jackson, que por aquel entonces ya era la figura más poderosa del mundo del pop (tras el éxito sin precedentes de sus discos Thriller (1982) y Bad (1987), que lo convirtieron en una estrella legendaria). Ambos comenzaron una inusual relación de amistad (Jackson tenía 32 años, y Macaulay 10) que perduraría hasta la muerte del cantante en 2009.

Culkin triunfó en los 90, pero desapareció de Hollywood con 14 años, para tomarse un descanso en su exitosa carrera. Desde 2003, ha ido haciendo cosas aquí y allá, pero nada que ver con su éxito anterior. Rumores de todo tipo le rodearon. Unos pensaban que estaba muerto, otros que era adicto a las drogas (parte de culpa la tuvo su película Party Monster (2003), aunque tampoco ayudó que fuese detenido por posesión de drogas en 2004); pero no. El actor se había dedicado a vivir su vida (no obstante, mantuvo una relación con la también actriz Mila Kunis que duró más de una década). Algo que no cambió durante todo ese tiempo fue su relación con Michael Jackson. El actor nunca ha querido hablar del tema, salvo cuando el cantante fue acusado de abusos sexuales a menores, por lo cual fue juzgado. Culkin fue de los pocos que se posicionó a favor del cantante, e incluso testificó que nunca se había sobrepasado con él ni había sufrido abuso alguno.

El actor no concede demasiadas entrevistas, y se muestra hermético con su vida privada, pero hablando con Marc Maron en su WTF podcast, el actor decidió cómo era en realidad su relación con el cantante.

Entre otras cosas, Culkin cuenta que conoció a Michael Jackson a la vez que a Donald Trump, que entonces eran amigos, y por lo visto, el cantante se acercó para decirle que le reconocía de Solos con nuestro tío.

“Vino detrás de las cámaras justo antes del show. Le encantaba bailar, era un bailarín”, recuerda, “Después del estreno de Solo en casa (1991) nos llamó a mi y a mi familia”. Los dos conectaron al instante, en parte por haber triunfado a una edad temprana. Según Culkin, ese detalle hizo que se entendiesen perfectamente. “No existe un grupo de apoyo para los actores infantiles. Él me dijo, ‘¿quieres que quedemos? ¿quieres venir a mi casa?’ Fue mi mejor amigo mientras crecía, era una amistad de verdad”, confiesa.

No solo era su amigo, sino que según el actor, le ayudó en momentos muy duros en su vida. El actor confesó que su padre le maltrataba a todos los niveles siendo un niño (cortó la relación con su padre), y Jackson lo ayudó, al haber pasado por una situación similar. Sin embargo, al hablar de las acusaciones por abusos, Culkin se mantiene en que no eran verdad.

“Nunca me sentí incómodo, esa era la manera en que él era, hasta la médula. Nunca fue raro. Simplemente era como era. Le miraba por quién era. En ese momento, yo era bastante famosos y conocí a mucha gente famosa. Su fama no le hacía ser diferente. No me había enamorado”.

Pero si hay una de las cosas de las que el actor todavía se niega a hablar, es de su ahijada, Paris Jackson, hija del famoso cantante. Cualquier pregunta que se le hace al respecto, la rechaza. Según el actor, es por protección, y más ahora que Paris ha elegido intentar tener una carrera en el mundo del espectáculo.

Con respecto a futuros planes, Culkin no tiene intención de actuar (a pesar de que los fans de Will & Grace estarían más que contentos de verle de vuelta), y a sus 37 años ya está “jubilado”, aunque se dedica a escribir la segunda parte de su biografía.