Lo que parecía una mañana tranquila en Espejo Público terminó convirtiéndose en un episodio que dejó sin palabras a Gonzalo Miró.
El tertuliano, habitual del programa, fue sorprendido en plena emisión con una advertencia en directo por parte de Susanna Griso.
Un momento inesperado que desató risas y confusión en el plató
Antes de dar paso a la sección del tiempo con Roberto Brasero, la presentadora decidió hacer una pausa para dirigirse seriamente a su compañero. “Antes, voy a reñir a este señor que tengo a mi vera porque tengo una telespectadora que me ha enviado un correo quejándose de tus posiciones en el sofá”, anunció Griso. El comentario dejó a todos los presentes en silencio durante unos segundos.

Algunos tertulianos creyeron que la advertencia tenía que ver con opiniones políticas, mientras que otros bromearon con la posibilidad de que se refiriera a otro tipo de “posiciones”. “¿Qué pensabas, que hablaba de sus posiciones políticas?”, preguntó Griso a Toni Cantó, quien respondía entre risas: “No, no, sexuales, las posturas”.
La reacción de Gonzalo Miró y la broma del ‘manspreading’
Gonzalo Miró, sorprendido por la situación, no dudó en tomárselo con humor: “No sé cómo satisfacer a todo el mundo, Susanna. Me están invadiendo los mails de gente que me pide que me siente de todas las maneras posibles: con los dos pies sobre el sofá o incluso así. Creo que algún programa debería hacerlo así”, comentó mientras cambiaba de postura y apoyaba los pies en el asiento.
El plató estalló en carcajadas mientras sus compañeros bromeaban con la escena. “¿Qué te crees que estás en un banco de botellón o qué?”, le reprocharon. Susanna Griso intervino con un comentario sobre la postura de Miró: “Oye, esto es un ‘manspreading’ en toda regla”, señaló, añadiendo más humor al momento.

La advertencia de Susanna Griso a todos los colaboradores
El momento terminó con una advertencia en tono de broma por parte Susanna Griso. “Voy a tener que poneros a raya a todos”, dijo entre risas, dejando claro que el tema de las posturas en el sofá de Espejo Público había quedado oficialmente bajo supervisión.
Lo que comenzó como un comentario de una espectadora terminó convirtiéndose en uno de los momentos más comentados de la emisión. Así, quedaban patentes, una vez más, la espontaneidad y el buen ambiente que reinan en el plató del programa matinal de Antena 3.