La historia de amor y amistad entre Freddie Mercury y Mary Austin es una de las más conmovedoras del mundo de la música. A pesar de la muerte del legendario líder de Queen en 1991, Mary ha vivido discretamente en Garden Lodge, la casa que Mercury le dejó en su testamento. Durante más de tres décadas, ha mantenido un perfil bajo, alejándose de los medios y protegiendo el legado de quien fuera su compañero de vida. Sin embargo, ahora, a sus 73 años, ha decidido hablar, sorprendiendo al mundo con sus revelaciones.
Mary Austin: La confidente de Freddie Mercury
Mary Austin nació en 1951 en Fulham, Londres, y tuvo una infancia marcada por la comunicación con sus padres sordos a través de la lectura de labios y el lenguaje de signos. En 1969, conoció a Freddie Mercury mientras trabajaba en la tienda de ropa Biba, en Londres. Desde el inicio, su relación fue especial. Aunque comenzaron como pareja sentimental, su vínculo trascendió lo convencional. Cuando Freddie le reveló su orientación sexual en 1976, la relación amorosa terminó, pero su conexión se fortaleció aún más.
Freddie la describió en múltiples ocasiones como su “esposa” en todos los sentidos, excepto en el legal. Le dedicó la emblemática canción Love of My Life y en su testamento le dejó la mayor parte de su fortuna, su casa en Garden Lodge y una parte de los derechos de autor de Queen. Mary estuvo con él hasta su último aliento, brindándole apoyo incondicional durante su batalla contra el SIDA.
El silencio de tres décadas
Desde la muerte de Freddie, Mary Austin se retiró de la vida pública, evitando entrevistas y cualquier tipo de protagonismo mediático. Ha vivido en Garden Lodge, el hogar que Mercury decoró meticulosamente, manteniendo intactos muchos de los espacios y recuerdos que compartieron juntos. Durante años, los fanáticos de Queen han dejado flores y mensajes fuera de la mansión, en homenaje al icónico cantante.
Sin embargo, Austin ha decidido hablar después de tantos años. En una entrevista reciente, expresó: “Ha llegado el momento de cerrar este capítulo y permitir que otros compartan lo que significó Freddie en sus vidas. Él siempre quiso que su música fuera su legado y no su vida personal.”
La subasta de los recuerdos de Freddie
Uno de los anuncios más impactantes que ha hecho Mary Austin es su decisión de subastar algunas de las posesiones personales de Freddie Mercury. Esta colección incluirá trajes icónicos, manuscritos originales de canciones, instrumentos y otros objetos de gran valor sentimental.
Austin explicó que esta decisión no fue fácil, pero siente que es hora de compartir estos recuerdos con los seguidores de Mercury alrededor del mundo. “Freddie me dejó estas cosas con amor, pero ahora siento que deben estar en manos de aquellos que lo admiraron y cuya vida tocó con su música.”
Entre los artículos que serán subastados se encuentra el emblemático traje de arlequín que Freddie usó en la gira de News of the World, su corona y capa reales que utilizó en el Magic Tour de 1986, y un manuscrito original de Bohemian Rhapsody. Parte de las ganancias serán donadas a organizaciones de lucha contra el SIDA, honrando el legado filantrópico de Mercury.
El impacto de Freddie en la vida de Mary
A lo largo de la entrevista, Mary compartió recuerdos íntimos de su relación con Freddie. Relató cómo pasaban horas conversando sobre la vida, la música y sus sueños. A pesar de la extravagancia que rodeaba a Mercury en el escenario, en la intimidad era un hombre cálido, generoso y profundamente sentimental.
Uno de los momentos más conmovedores que recordó fue la última conversación que tuvo con él. “Me tomó la mano y simplemente sonrió. Sabía que su tiempo se agotaba, pero no tenía miedo. Me pidió que cuidara de su legado y de la casa que tanto amaba.”
También confesó que ha guardado en secreto la ubicación exacta de las cenizas de Freddie, cumpliendo su deseo de que nadie supiera dónde descansan sus restos. “Era su última voluntad y la he respetado. Es un secreto que llevaré conmigo hasta el final.”
El precio de la herencia y el aislamiento
Recibir la fortuna de Freddie Mercury no solo trajo privilegios, sino también grandes desafíos. Mary admitió que, tras la muerte de Freddie, enfrentó la envidia y el resentimiento de muchas personas cercanas a él. Incluso algunos miembros de Queen expresaron su descontento con la forma en que se distribuyó la herencia.
“Había mucha gente que no entendía por qué Freddie me dejó tanto. Pero nuestra relación era más que una simple amistad. Éramos familia en el sentido más profundo de la palabra.”
Con el tiempo, la presión mediática y los conflictos con ciertos allegados la llevaron a aislarse aún más. “Hubo momentos en los que sentí que estaba atrapada en Garden Lodge. Era mi refugio, pero también mi jaula.”
La vida después de Freddie
Mary Austin construyó su vida lejos de los reflectores, enfocándose en criar a sus hijos y vivir una existencia tranquila. Tuvo una relación con el pintor Piers Cameron, con quien tuvo dos hijos, pero nunca se casó.
A pesar del tiempo transcurrido, la conexión con Freddie Mercury sigue viva en su corazón. “Nunca dejé de sentir su presencia en mi vida. Garden Lodge es un testimonio de nuestra historia y cada rincón guarda un recuerdo.”
Con la subasta y su decisión de hablar públicamente, Mary Austin parece estar cerrando un ciclo importante. Aunque nunca ha dejado de extrañar a Freddie, ahora se siente lista para seguir adelante sin el peso de su legado sobre sus hombros.
Conclusión: Un amor que trasciende el tiempo
La historia de Mary Austin y Freddie Mercury es una de las más emblemáticas del mundo de la música. Más allá de ser una ex pareja o una amiga, Mary fue el pilar emocional del líder de Queen. Su lealtad, amor y compromiso con su memoria la convierten en una de las figuras más admiradas por los fanáticos de la banda.
Su decisión de romper el silencio y compartir su historia demuestra que el amor, en cualquiera de sus formas, puede ser eterno. A través de los años, ha honrado la memoria de Freddie con dignidad y respeto, asegurando que su legado perdure para las futuras generaciones.
Ahora, con 73 años, Mary Austin se despide poco a poco de las posesiones materiales de su gran amor, pero su conexión con él seguirá viva en los recuerdos y en la música que sigue emocionando a millones en todo el mundo.
¿Qué opinas de la decisión de Mary Austin de hablar después de tantos años? ¿Crees que la subasta es una forma de cerrar el capítulo o un acto de desprendimiento necesario? Déjanos tu comentario y comparte este artículo para que más personas conozcan esta conmovedora historia.
